En su pasada columna del 20 de mayo, la feminista ultra-abortista y anticatólica, Florence Thomas, mostró sus cartas frente a los candidatos, mostrando su agrado con el hecho de que tres de los cinco candidatos en la contienda podrían legalizar el aborto y el “matrimonio” entre personas del mismo sexo.
De Juan Manuel Santos dice “Estoy casi segura de que en su fuero privado e íntimo está de acuerdo con la legalización total del aborto, algo que de pronto no puede o no se atreve a decir por cuestiones políticas.” Algo en lo que no se equivoca, pues durante sus cuatro años de gobierno, la administración Santos realizó varias tentativas por la legalización total del aborto. De Peñalosa dice: “ha declarado en entrevistas a los medios que él está de acuerdo con la legalización total del aborto. En este país tan godo es una postura valiente y que nos reconforta.” Y de Clara López: “a ella la conozco y sé que no solamente acatará el fallo de la Corte Constitucional, sino que lucharía por la ampliación de los derechos sexuales y reproductivos tratando de legalizar el aborto.”
Por el contrario, frente a Martha Lucía Ramírez, se declara decepcionada porque “restringe dramáticamente las tres excepciones del fallo de la Corte Constitucional. Incluso, en el caso de malformación del feto, ella está totalmente en contra.”
Pero toda su ira la reserva para el candidato Óscar Iván Zulauga del Centro Democrático, pues no le perdona su “negativa total incluso respecto a las tres excepciones estipuladas por la Corte Constitucional” junto al hecho de que “firmó el indignante referendo exclamando: ‘Yo creo que en eso no puede haber discusión ni puntos medios, porque la vida es una sola desde la concepción hasta la muerte natural’.”
Como ven, es la extrema derecha en todo su esplendor. Con posturas del Opus Dei y del fundamentalismo religioso. Bueno sería recordarle que desde 1991 el Estado colombiano es un Estado de derecho laico y moderno. Y con todo respeto, si quiere ser Presidente, que se vaya a un país bien atrasado, sin clases medias ilustradas, ni intelectuales, ni mujeres autónomas y pensantes.
“Indignante Referendo”, es como llama al movimiento de 2 millones de colombianos que ante el Congreso de la República demandad que se respete el Derecho a la Vida desde la concepción hasta la muerte natural. El pasado sábado 17 de abril, más de 90.000 personas salieron en las ciudades de toda Colombia a exigir el fin del aborto. Ese es el país que esta señora, que ni siquiera es Colombiana de nacimiento, llama “atrasado” por no querer retroceder a la antigüedad pagana en que el infanticidio era práctica regular.
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