Suscríbete a nuestro Boletín Semanal




Únete a Voto Católico Colombia

miércoles, 19 de abril de 2017

El nuevo profeta del fanatismo ateo, el Ministro de Salud Alejandro Gaviria, vuelve al ataque

Resultado de imagen para alejandro gaviria

En una verdadera ostentación de “fracasomanía” el Ministro de Salud, Alejandro Gaviria, continúa en su gira por los medios de comunicación para tratar de vender como novedad su libro “alguien tiene que llevar la contraria”, publicado hace más de 6 meses. Siguiendo el ejemplo de otros paladines de la corrección política, como Daniel Samper Ospina o La Pulla, Gaviria ha entendido que nada vende más que la visceralidad irracional y desvergonzada, por lo que en la nueva entrevista que dio a Caracol Televisión arremete con nuevo ímpetu contra los colombianos que no profesamos su ideología atea.

A continuación un fragmento de la entrevista (Comentarios nuestros en rojo):

Usted le da palo a los extremos, a la derecha y a la izquierda

Hay una frase del intelectual Voglio: “Yo odio los fanáticos”. No me gusta el fanatismo ni de izquierda ni de derecha. [En línea con la pardoja de la “intolerancia de los tolerantes”, la vehemencia del Ministro para atacar a los que caricaturiza de “fanáticos” es perfecto ejemplo del fanatismo que dice combatir]

¿Usted es ateo?

Yo soy ateo, respetuoso. [En efecto, llamar “mercader de la inmortalidad” a la Iglesia Católica muestra bien lo “respetuoso” del ateismo del Ministro] Soy producto de lo que he leído [Más bien de lo que no ha leído, pues si algo caracteriza el discurso del Ministro es la arrogancia para pontificar sobre lo que ignora], de lo que he vivido, la forma como concibo el mundo, pero me gusta la espiritualidad. Pienso que es importante para los humanos tener el sentido de la trascendencia.

Primero habla de una historia personal, pero pone un tema que es crítico, el tema de la salud pública y temas que tienen que ver con la sexualidad y entra un cuestionamiento grande al tema de los sacerdotes y de la fe en Colombia utilizada para este tema.

Aquí en el ministerio me ha tocado dar varias peleas muy complejas en esa dirección.

Una es la vacuna del papiloma humano, que algunos fundamentalistas religiosos [Esa es su forma de etiquetar a los cientos de padres de familia de las niñas afectadas] la llaman la vacuna de la promiscuidad. [Y así es como pretende resumir las denuncias por daños graves a la salud de las niñas que la han recibido] La otra es la lucha por la interrupción voluntaria del embarazo [El asesinato de los niños por nacer], que es un derecho de las mujeres colombianas.[Que es un crimen que clama a Cielo por justicia]

¿Ni siquiera aceptando la sentencia de la Corte?

Yo básicamente lo voy a decir con absoluta claridad. Ha habido una persecución desde la Procuraduría a todos los funcionarios públicos que se atrevieron a entrar en ese tema. [¿Se refiere a las maniobras del Ministro para mantener con vida la reglamentación del aborto que el Consejo de Estado anuló una y otra vez?] De Alejandro Ordoñez hacia abajo.

¿Él lideraba?

El lideró casi una cruzada en contra de funcionarios honestos que querían cumplir lo que había estipulado la Corte Constitucional.

¿Cómo era esa persecución?

Con investigaciones disciplinarias abiertas, con demandas a todos los actos administrativos, con cartas que llegaban aquí todos los días, con citaciones al Congreso de algunos congresistas aliados de esa causa que yo combato [Al menos reconoce que combate abiertamente la causa de la Vida], no solo intelectualmente sino con políticas públicas. [Como las políticas que establecían apoyo económico para la mujer embarazada, como forma de prevenir el aborto, y que el Ministerio combatió y bloqueó]

¿Eso que tanto daño hizo?

Yo creo que hizo mucho daño por lo siguiente, en Colombia según las estadísticas disponibles, que no son muy exactas, hay 300 o 400 mil abortos clandestinos. [Que el Ministro que se llena la boca hablando de “argumentos basados en evidencia” insista en la cifra inventada de 400.000 abortos, es cínico] Tenemos la jurisprudencia constitucional en este tema más sofisticada de América Latina. Pudimos haber evitado muchas muertes y sufrimiento humano. [¿Evitado muertes y sufrimiento matando niños?]

Muy grave esa denuncia

Me parece grave lo que pasó en Colombia, además es utilizar el poder intimidatorio de un organismo de control para que el país no consolide un derecho. [¿Se refiere a la intimidación del Ministerio de Salud contra las instituciones de salud para violar el derecho a la objeción de conciencia?]

La siguiente frase que usted dice y encaja en eso: hay que cuestionar a los salvadores de almas. ¿Cómo es eso?

Yo creo que quien trata a uno de salvarlo y de imponerle su visión del mundo… [¿y qué decir de los que pretenden imponer la perdición a las almas?] hay una frase por allá en la Revolución Francesa, los que se creen puros buscando a los menos puros para depurarlos. [Interesante que reconozca su filiación ideológica con el peor genocidio de la historia francesa]

¿Eso era el procurador?

Sin ninguna duda.

Y ahora es candidato presidencial

En esos estamos. Las sociedades tienen que estar basadas en la diversidad; que todos podamos pensar distinto, y cuando uno cree que está por encima de todo el mundo y que su labor es de depuración moral empiezan los problemas. [¿Lo dice quien se da la autoridad de criticar la moral de la mayoría de los colombianos?]

La vida sin religión vale la pena…

Yo creo que se puede encontrar significado, sentido de trascendencia más allá de las religiones; yo siendo muy respetuoso de las creencias religiosas. [Claro, muy respetuoso llamándolas “fanatismo”]

Hay una frase más de ese tema. Los ateos y religiosos somos vecinos de apartamento y dice los ateos y los agnósticos no cometen más crímenes que quienes comulgan cada domingo. [¿Lo dice el promotor de miles de crímenes contra los niños por nacer?]

La historia de la Iglesia ha sido una historia violenta [¿Lo dice quien cita a la Revolución Francesa como raíz ideológica?] así lo tenemos que aceptar la humanidad. Hay una frase de Héctor Abad Faciolince, que se definió, y yo me definiría de la misma manera, como un ateo maenso.

No busquen todas las respuestas en un único libro o predicador por elocuente que sea. Esos son con frecuencia los peores. ¿En Colombia quién es así hoy?

Yo creo que Colombia está viviendo una polarización, tenemos un tema muy complejo, donde la extrema derecha y la extrema izquierda tratan de presentar un único dogma. [¿Lo dice quien lleva medio año tratando de vender un único libro?]

Desconfíen de los profetas, los iluminados, de los que creen en las soluciones totales

Lo podemos ver en la reciente historia de la humanidad, qué pasa cuando llega un iluminado que dice borrón y cuenta nueva, vamos cambiar completamente la sociedad…¿qué es lo que ocurre? [Escuchen al “iluminado”, al “profeta” de la “fracasomanía” que viene a cambiar completamente la moral de los colombianos]

Desafortunadamente a los seres humanos nos gusta eso, nos gusta el gregarismo, [Que lo diga él que agrupó en un mismo saco a todas las niñas afectadas por la vacuna contra el VPH, para luego desestimarlas como “psicogenia masiva”] seguir a cualquiera que nos presente la respuestas para estas preguntas tan difíciles.

¿Que tan lejos estamos de caer en Colombia en una situación de esas con un profeta, como le ha pasado a Venezuela, a otros países, incluso como algunos dicen le está pasando a Estados Unidos?

Yo tengo esa preocupación. No sé qué tan lejos no sé si sea un evento probable pero es un evento posible. El clima de opinión de este país es tan complejo, la misma polarización política. Segundo, y es un hecho que no se ha dimensionado mucho. Las clases medias urbanas con mayor información están viendo que los problemas tradicionales estaban ahí que no nos preocupábamos ya comienzan a ser evidentes. Es una ciudadanía más informada.

Y tercero las mismas redes sociales.

También los problemas que tenemos como sociedad algunos recientes, otros más antiguos. Yo si veo una especie de contradicción

Nuestro país tiene muchos problemas, pero también muchas virtudes y eso parece depreciarse completamente. [Especialmente por los tecnócratas que caricaturizan y combaten la virtud de los colombianos]

Esa es la “fracasomanía”, cuando las soluciones que son importantes, pero que no son perfectas, comienzan a ser odiadas, por todo el mundo nuestros esfuerzos reformistas pueden terminar en la nada.

El Ministro de Salud es el peor evaluado de todo el gobierno Santos, y no es que los demás sean mucho mejore, y su respuesta es denostar de las opiniones y los valores de los colombianos, arrogándose una superioridad moral, una categoría de “iluminado” que sin rubor dice combatir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario